Os voy a contar el día más amargo de mi vida, fue cuando termine mi curso escolar en C.P.E.E. "SANTA ROSA DE LIMA" en PORTADA ALTA MALAGA, con 21 años cuando más integrado estaba en mi cole, justo en ese momento me echan del colegio porque la ley lo dice así, ya no había lugar para mí, me quitan todo de golpe, me quedé solo, sin mis compañeros, compañeras, que eran mis amigos, sin mis profesores y lo peor de todo, sin mi oficio que era la alfarería, con lo que yo más disfrutaba, amasando el barro,
palpándolo, dándole formas hasta conseguir figuras, mis manos se fundían con él, lo manejaba tan bien que me llegaron a dar un diploma.
Mis profesores/as todos ellos eran muy buenos, en el deporte me fue fenomenal gane medallas olímpicas con la asociación ANDE, en el deportivo olímpico de Sevilla gane, la de maratón y en la ciuda
d Deportiva de Málaga la de natación.
El baloncesto se me daba muy bien, no veas como encestaba, las niñas me vitoreaban y me besaban, quería ser mis novias, hasta me mandaban cartas de amor.
Me hundí en la tristeza, es como si te arrancaran un pedazo de ti, además le añades que mi compañera y amiga, la que me escribía cartas de amor diciendo que yo era su novio, murió…, la única que se dio cuenta de todo lo que me estaba pasando, de mi tristeza y de mi pena fue mi madre, me llevo a todos los médicos para averiguar que me pasaba, pero ningún medico la escuchaba, recorrí todos los especialista: cardiólogo, neurólogo, traumatólogo, digestivo, no encontraban nada, todo estaba dentro de mí mente, era porque una parte de mi vida se fue justo el día que me echaron de mi colegio, lo único que decían los psicólogos que era una forma de llamar la atención, el que más me hundió fue en el Centro de Salud de Carraque de Málaga, un Psiquiatra llamado “Merchán” nos dijo a mi madre y a mí, que no pidiese más, y para colmo le dijo que lo que yo tenía era un retroceso irreversible, que yo jamás recordaría nada, mi madre no le quiso creer, el seguía insistiendo de que yo ni sentía ni padecía, ¿qué maneras son esas de hablar de una persona? se supone que está ahí para ayudar, ¿y que soy? un mueble… para no sentir ni padecer…., yo me entero de todo y siento y padezco igual o más que cualquier persona, al escuchar aquello me quede clavado en la silla, a mi madre le vi una blancura en su cara, y le dijo al psiquiatra que no sabía lo que decía, que no tenia corazón, que ella tiene 4 hijos todo las querían, pero yo me destacaba en la forma de demostrárselo, (y qué razón tiene mi madre, yo cuando la veo triste me pongo a hacerles carantoña para que ella se ría), en la consulta, de la rabia que tenía me quede clavado en la silla y tuvieron que sacarme entre 4 personas, mi madre nunca más me llevo a ese psicólogo si se le puede llamar así, que por no llamarlo de otra forma le llamaremos un hombre poco humano, y sin sentimientos.
También me llevó al otorrinolaringólogo, por si tenía algo en las cuerdas vocales, porque después de todo aquello me quede mudo, mi madre como buena luchadora no paro de pedir ayuda para sacarme de esta depresión, fue mi madre a entrevistarse con Carmen Linares hija del preciado Psicólogo Linares Pezzi, el que fundo el cole para niños discapacitados, su hija Carmen estaba de profesora en el Colegio Dulce Nombre de María de la barrida “El Palo”.
Mi madre me dice, que siempre le estará muy agradecida a esta señora por la ayuda incondicional que nos dio, la señora Carmen Linares vino a conocerme a mi casa y a presentarnos a 6 psicólogos, que harían la obra milagrosa de ayudarme a salir de la depresión, se llamaba “Proyecto Amanecer” recuerdo algunos nombre Loli, Eva, Sandra, Lidia, y Alejandro estos dos últimos, fueron los que no dejaron el timón hasta llegar a buen puerto, apostaron por mí y consiguieron muchas cosas. (Una anécdota bonita de ellos, se conocieron en mi casa se hicieron novios y se casaron, que por cierto todavía les debo un regalo)
Alex y Lidia los dos son maravillosos, e hicieron maravilla conmigo, a mi me daba miedo salir a la calle, montar en los autobuses, en los taxi, recuerdo que mi amigo Alex consiguió montarme en su moto, en su coche, y en el autobús, para subir en su moto yo me cogía a mi amigo por la cintura fuertemente y éramos dos cuerpo en uno, así consiguió quitarme el miedo, Lidia también trabajó mucho para que aquello funcionara, el primer día que salimos a la calle, bajamos con mi perrita Linda, la radio, el balón, el radio cassette y mi gran amiga Lidia cargo con todo por conseguir de que yo saliese a la calle y lo consiguieron, eso ocurrió en el 2000. Otra vez vuelvo a mencionar que con paciencia cariño y amor, todo se consigue. Me gustaría saber de ellos y que es de sus vidas.
Agradecido a Carmen Linares:
Entrevista a Carmen Linares Pezzi 
